RECURSOS PARA APRENDER EN LAS DISCIPLINAS

Al ingresar a la universidad las y los estudiantes se enfrentan a múltiples desafíos. Uno de ellos es adaptarse a las nuevas formas de estudiar y aprender. ¿Cómo organizar el tiempo en semanas de exámenes? ¿De qué manera lidiar con la ansiedad frente a los desafíos académicos? En estos recursos encontrarás herramientas para lograrlo.

¿Cómo usar el método PLHER para comprensión lectora?

El método PLHER es otra aproximación a las sesiones de estudio en las que tengas que realizar lecturas. Aborda diferentes etapas que buscan ayudarte a reconocer la información importante e incorporarla a tu conocimiento previo. Su nombre proviene de las iniciales de cada una de sus etapas, las que puedes revisar a continuación:
Involucra una primera lectura panorámica, en la que “echas un vistazo” al texto. También debes revisar lo que ya sabes sobre el tema que vas a leer, y hacerte algunas preguntas para trabajar en las siguientes etapas.

Esto te servirá para iniciar tu ciclo de concentración, anticipando el tema de tu lectura y con algunas ideas sobre la estructura de tu texto.

Significa abordar la lectura más concentrada y atenta del texto, abordándolo párrafo a párrafo. Acá puedes emplear diferentes estrategias de estudio como subrayar las ideas claves, tomar apuntes o notas al margen, consultar las palabras desconocidas en un diccionario, etc.

Lo ideal es que este sea el momento de máxima concentración en tu estudio, para así poder captar el contenido.

Significa emitir con tu voz y tus palabras las ideas centrales de los párrafos. Puedes dar respuesta a las preguntas que te hiciste, y también dar una explicación de tu lectura a otra persona. Así, logras apoyar la identificación y retención de las ideas clave.

Esto te ayuda a activarte, pues involucra nuevos sentidos versus las etapas anteriores, y te ayuda a identificar si tienes dudas o vacíos de comprensión.

Propone que anotes una síntesis del tema o generes otros productos de tu lectura, como podrían ser esquemas o mapas, hacer resúmenes, redactar las ideas principales de forma coherente, etc.

Esta etapa te permite elaborar la información que aprendiste, lo que te permite apropiarte de lo leído, mejorar la retención y activar tu cuerpo de una forma nueva.

Significa volver a revisar lo que realizaste en la sesión, para poder retener más la información y detectar si tienes algunos puntos que no están claros. Repasar es, en general, una buena estrategia pues, cada vez que repasas, ayudas a mejorar tu retención de los contenidos leídos.
Recuerda que usar técnicas de estudio variadas puede servirte para aumentar tu concentración. En este caso, esta técnica te permite usar tus sentidos en formas diversas. ¿Te animas a usarla?


Profundiza

Si quieres profundizar aún más, puedes acceder a este contenido adicional que te entregará más y mejores herramientas para potenciar tus habilidades:

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